Invito a todos los Contadores a empezar un camino nuevo, y desde la "mayoría de edad" de Kant. Hay que acabar la pereza que nos permiten a algunos opinar por otros. Yo personalmente tendré como misión el opinar en forma crítica los males y desventuras de nuestra profesión, hacia propuestas racionales.
Temprano se adquiere experiencia laboral después de la pasión por el estudio de los dos últimos años de bachillerato, pasión por todas las materias que permiten adquirir la capacidad de hacer juicios analíticos. La experiencia que sucede al conocimiento básico en artes liberales mas nociones de ciencia y matemáticas del bachillerato, se vive en la naciente industria de Mamonal (Cartagena); el énfasis es la experticia en operación de procesos químicos – industriales, pero en su nivel de operario calificado.
La pobreza obliga a renunciar a las ambiciones de ser "doctor" o "ingeniero" a edad temprana en una universidad de reconocido renombre en Colombia. El "sueño americano" empieza a aparecer y cada día se cristaliza una visa de estudiante para USA.
El inglés del bachillerato y el temor por la marihuana se atraviesan como amenazas, que pronto son superadas primero por una validación a edad temprana de un bachillerato gringo que se asimila por la pasión juvenil hacia el estudio; y el temor por la ola de influencia de la marihuana y LSD naciente en usa, se sobrepasan por una educación y una convicción religiosa que no había matado todavía la cientificidad incipiente.
En los USA, el mundo académico del pueblo anglo- afro-americano se asimila por un recorrido frustrante muchas veces por lo caro, y se certifican competencias laborales en estudios preuniversitarios en procesamiento de datos y programación de computadores. La vida laboral, alterna al estudio, aporta la visión sobre el "modo americano de los negocios", con énfasis en la cadena de suministro y control de inventarios. Las lecturas de periódicos, el vicio por la televisión y la locuacidad innata, apuntan a un dominio del inglés como segunda lengua.
El regreso a Colombia se hace por la convicción de que el estudio en el sistema gringo se podía seguir si se tiene acceso a créditos educativos, lo que un estudiante pobre de un país pobre y sin patrocinio no podía conseguir. El buen nivel de inglés y las certificaciones sobre computadores abren puertas laborales; el reforzamiento de los estudios en USA consigue hacer pasar los exámenes de admisión universitarios. Aparece Contaduría.
Aparecen la contabilidad de suministros y equipos de exploración y explotación petrolera, costeo de productos derivados de la refinación de petróleo; liquidación de contratos de compras, importación, exportación de crudos; liquidación de tanques y trasiego de petróleo; contabilidad de facturación de productos derivados. Este periodo transcurre con el avance académico en la novel carrera profesional de "Contaduría Publica".
Parranda vallenata, trabajo y hogar. Mas todo la holgazanería que da la estabilidad laboral privilegiada adormecen la producción académica. En este periodo se acumula experiencia laboral en los círculos de las altas finanzas y contabilidad internacionales, dentro de empresas multinacionales de primera línea.
La alta especialización favorece una movilidad en multinacionales agrícolas, mineras, petroleras, servicios mineros y petroleros, activos biológicos de zoocria y cultivo. Esta movilidad lleva a adquirir más y mejores competencias en sistemas, finanzas, administración de recursos empresariales. Las firmas extranjeras de auditoria prefieren tener dentro de las compañías contralores y ejecutivos con estos perfiles. La vivencia presencial en el extranjero incentiva mis aspiraciones a titulaciones de postgrados, cuya culminación se frustran por lo económico. Los críticos y los colegas aburridos hablan de este periodo como de inestabilidad, y así se lo hacen saber a la clase empresarial y académica cartagenera. Esta fiel a su tradición excluye por consejas y marca duramente la piel del moreno.
En el año 2000 después de algunos proyectos transnacionales fracasados por el languidecimiento de la inversión extranjera directa y a los albores de la vejez laboral, se regresa a Cartagena para iniciar un proyecto académico e investigativo.
Este proyecto académico- empresarial – investigativo, que ha tenido siempre como corazón la utilización de la tecnología de información, del inglés y las regulaciones internacionales, comienza a tropezar con "nadie es profeta en su tierra". Yo me dije "menos Hernán". Me equivoqué, y lo pague caro, ya que al querer probar mi "maestrías" no certificadas (conocimientos, y experiencias), tropecé con el canibalismo y la exclusión que junto a mi terquedad y mi tozudez, casi me llevan a la tumba. La quiebra personal asomó sus narices. Esta quiebra estuvo acentuada por la necesidad de financiación de los compromisos por continuos viajes a USA en busca del conocimiento.
Desde ya hace un tiempo, no muy largo, estoy empezando a cosechar los triunfos espirituales y económicos de mis esfuerzos gracias a algunos amigos como www.actualicese.com. Los años de lucha en las que mi único refugio económico era ir en vacaciones a USA a hacer algunos dólares, se han acabado y he conseguido finalizar una navegación profunda desde la raíces de la contaduría hasta las competencias mas necesitadas en la era de la información empresarial global. De Colombia he aprendido a diferenciar entre los contadores escribidores y conferencistas copietas y los que tienen discursos propositivos (remember ECAES).
Desde el día del Contador y desde mí cátedra de la Universidad de Cartagena, estaré lanzando mi propuesta para hacer un revolcón gremial, académico, regulativo de la Contaduría Publica en Colombia. Para lo anterior también les pediré permiso a las autoridades académicas de la UDC, para que me otorguen un espacio dentro de las conferencias programadas para el día del Contador. Y a todos mis colegas que puedan hacer algo por conseguirme una invitación a disertar y controvertir a la clase dirigente inamovible y anquilosada en su hábitat y en sus santuarios.
Invito a todos los Contadores a empezar un camino nuevo, y desde la "mayoría de edad" de Kant. Hay que acabar la pereza que nos permiten a algunos opinar por otros. Yo personalmente tendré como misión el opinar en forma crítica los males y desventuras de nuestra profesión, hacia propuestas racionales.
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