La búsqueda del beneficio por parte de las personas es una realidad. La búsqueda del beneficio entre múltiples actores hace aparecer los roces y fricciones propias de las subjetividades. La subjetividad en los juicios se adiciona a la construcción de realidades a veces discrepantes entre personas con las mismas ideologías, cultura y fines comunes de lucro. Otra realidad son las limitaciones de la memoria humana que obliga al registro de los intercambios que ocurren en la búsqueda del beneficio.
Si se parte de estas realidades, se podría explicar la complejidad actual de la información financiera y las regla para su preparación. Para esta explicación es necesario recurrir a la no menos compleja técnica contable del doble registro que mantiene balanceada una ecuación que fundamenta la esquiva realidad financiera. Los roces creados por las circunstancias históricas y las propuestas innovadoras propias de las realidades de cada época, que influyen en la inherencia de la información financiera pueden ser explicados por el conflicto de las tres Ps: Paradigma, Paradoja y Parálisis.
Sistemas para registrar libros manuales evolucionan hacia el registro electrónico pero siguen respetando la concepción del documento en papel. La velocidad de captura de los registros de la cadena de suministro con las nuevas tecnologías permite escribir la historia muy sobre los sucesos, y esto nos permite tratar de modelar el comportamiento de estos mismos sucesos para el futuro. Concepciones del pasado conviven con las del presente amenazándose mutuamente y ambas también son amenazadas por la incertidumbre que plantea el futuro supuesto.
El interés por el rendimiento del patrimonio y la obligación de aportar al mantenimiento del estado mantienen siempre abierta la fábrica de reglas. Para lo primero el registro contable necesita ser regulado para posibilitar demostrar el mantenimiento del patrimonio y su crecimiento. Para lo segundo los registros contables deben recibir atributo de gravabilidad y deducibilidad tributaria desde múltiples reglas.
El registro contable extraído de los documentos en papel se ha alojado históricamente en las estructuras de las bases de datos para su posterior exploración y explotación ("sacar listados"). Cuando los documentos en papel se convierten, en virtud de las nuevas tecnologías, en documentos electrónicos algo debe cambiar en su captura, alojamiento, transporte y comunicación.
La contabilidad financiera, con su propósito de suministrar información útil, tiene a su disposición múltiples formatos y tecnología de formatos que hacen de la labor de reportar información una dedicación muy individualizada y carente de normalización. Esta problemática se solucionaría si se encuentra el camino para posicionar una tecnología informática que pueda apropiarse de un acuerdo de normalización alrededor de la representación electrónica de lo financiero. Esta representación debe enlazar las respuestas que los estándares dan a los significados, contenidos, regulación, cálculo y presentación para que el aseguramiento y la confianza puedan deshacerse del error y la subjetividad en la aplicación de las reglas de reconocimiento y medición.
Solucionado el problema de la estandarización de la información de los negocios a nivel de cuentas y para las partes interesadas a nivel de estados financieros auditados, entonces la tecnología informática debe estar en disposición de hacer las transformaciones hacia otras necesidades de información con otros criterios. Se debe posibilitar por ejemplo la asignación de atributos de gravabilidad y deducibilidad para armar información de carácter tributaria.
Con la tecnología de información XBRL debemos posicionar otros paradigmas, embarcarnos en descifrar otras paradojas y derrotar la parálisis.